La policía de Colombia ha detenido a un operario del Cartel de Sinaloa de México que intentaba comprar laboratorios de cocaína pertenecientes a las FARC de Colombia, en otra señal de que el cartel está aumentando su alcance en la cadena de suministro de drogas.

Héctor Manuel Coronel Castillo, también conocido como “Rincón”, fue capturado tras una operación encubierta que duró seis meses en la ciudad colombiana de Cali. Al parecer, Coronel se desplazaba por todo el país para administrar los negocios del cartel mexicano, según El Tiempo.

La policía dijo que el año pasado, Coronel, con la ayuda de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fue el responsable de al menos diez toneladas de cocaína enviadas de Colombia a México. También había sido el encargado de comprar laboratorios de cocaína a las FARC, en los departamentos (pronvincias) de Cauca y Nariño, cerca a la frontera con Ecuador.

El enlace del Sinaloa aparentemente negoció con los líderes de la columna Daniel Aldana de las FARC, quienes garantizaron el traslado seguro de las drogas desde los laboratorios de procesamiento en Colombia hacia el exterior.

Según las autoridades colombianas, la cocaína era transportada a la ciudad portuaria de Buenaventura y luego embalada en barcos que la llevaban a Centroamérica y finalmente hacia Estados Unidos.

En la operación, la policía también capturó a Narciso Portilla Arévalo, un colombiano con vínculos con el Cartel de Sinaloa, según Caracol.

Análisis de InSight Crime

Hablar de que el Cartel de Sinaloa está comprando los intereses comerciales del narcotráfico a las FARC no es nada nuevo. En 2013, reportes sugirieron que la guerrilla estaba vendiendo sus plantaciones y laboratorios de coca al grupo mexicano, adelantándose a un acuerdo de paz en potencia con el gobierno colombiano.

Los guerrilleros y el gobierno están en medio de unas largas negociaciones, y ahora han llegado al tercer elemento de un programa de cinco puntos -la industria de las drogas ilegales. Estas últimas negociaciones entre las FARC y el Cartel de Sinaloa pueden ser señal de que los líderes de la guerrilla están hablando en serio con respecto al tema la paz y a retirarse del comercio de las drogas, a pesar de que es poco probable que los comandantes de nivel medio y los guerrilleros de bajo rango y aprueben esta medida.

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Negociaciones directas del Cartel de Sinaloa con las FARC también sugieren que el cartel ha estado buscando nuevos socios en el brote de la implosión de los Rastrojos, sus aliados desde hace mucho tiempo en el contrabando de drogas de Colombia. Otros aliados, como el clan Cifuentes Villa, también han caído, y es probable que el Cartel de Sinaloa necesite reforzar su línea de suministro.

Al ir directamente a las FARC, que controlan grandes extensiones de tierras de cultivo de coca, y quienes ya les suministran cocaína, el Cartel de Sinaloa también se ahorra a los intermediarios, y por lo tanto puede reclamar una mayor porción de las ganancias.

5 respuestas a “Adquisición de laboratorios de drogas en Colombia demuestran expansión del Cartel de Sinaloa”