Un nuevo estudio sugiere que las finanzas de los carteles de la droga mexicanos podrían verse golpeadas si las iniciativas de votación para legalizar la marihuana, en algunas partes de Estados Unidos, son aprobadas por los votantes, aunque el efecto general sobre la situación de seguridad del país probablemente sería limitado.
El estudio, (.pdf), publicado el 31 de octubre por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), encontró que los carteles mexicanos de la droga podrían ver caer sus ingresos hasta en un 30 por ciento en todas partes, si las actuales iniciativas sobre la legalización de la marihuana son aprobadasen tres estados.
El 6 de noviembre, residentes de los estados de Colorado, Oregon y Washington votarán sobre medidas que permitan a los adultos cultivar, vender y poseer pequeñas cantidades de marihuana para el uso recreativo. Aunque los sondeos de opinión en Oregon muestran que es poco probable que el referendo sea aprobado allí, tanto Colorado como Washington tienen posibilidades de aprobar sus respectivas medidas.
Usando un modelo estadístico, los investigadores del IMCO estimaron el precio legal de la marihuana producida en Oregon, Washington y Colorado basado en la demanda local. Luego ellos asumieron que parte de la droga sería traficada en otros estados, y que sería más probable que los compradores de marihuana en el país escogieran la marihuana local sobre la marihuana mexicana debido a su precio más bajo.
Como un resultado de esto, el reporte del IMCO estima que los carteles mexicanos perderían US$1.425 billones si la iniciativa pasa en Colorado, US$1.372 billones si Washington vota por la legalización, y US $1.839 billones si Oregon aprueba la propuesta.
El informe no mira cómo la legalización de la marihuana podría afectar a los carteles individuales, pero según el analista mexicano Alejandro Hope – uno de los autores del informe – el poderoso Cartel de Sinaloa es el que más tiene que perder si las iniciativas pasan. En una rueda de prensa que señalaba la publicación del informe, Hope dijo a la prensa que el cartel podría ver caer sus ganancias en un 50 por ciento si las medidas pasan.
Análisis de InSight Crime
IMCO no es el único en sugerir que las laxas leyes sobre la marihuana podrían ser beneficiosas, en el largo plazo, para la “guerra contra las drogas”. El informe llega en un momento en el que el interés en el hemisferio, por buscar alternativas a las políticas de drogas, es el mayor en la historia reciente, con los jefes de estado de Guatemala, Colombia, Mexico y Uruguay expresando interés en la despenalización de la marihuana como una forma de reorientar los esfuerzos de la aplicación de la ley sobre drogas más nocivas y el crimen violento asociado a ellas.
Pero mientras muchos analistas han señalado los hipotéticos beneficios de tales medidas, el número de variables involucradas en el mundo real sugiere que la legalización de la marihuana no necesariamente reduciría el poder de los grupos criminales mexicanos. Por un lado, incluso el porcentaje de las ganancias del cartel que proviene de la marihuana no es claro, a diferencia de otras drogas. Aunque los oficiales de Estados Unidos han dicho que el 60 por ciento de las ganancias de los carteles mexicanos proviene de la marihuana, esto ha sido discutido por los analistas de la Corporación RAND, que puso la cifra más cercana del 15 al 26 por ciento, y dijo que las ganancias provenientes de los cargamentos de cocaína hacia los Estados son cerca del doble.
Sin embargo, incluso si la legalización de la marihuana en algunas parte de Estados Unidos cortara las finanzas de los carteles, no tendría un gran efecto a largo plazo sobre la violencia o la actividad criminal en México. Grupos como el Cartel de Sinaloa y los Zetas han demostrado una impresionante capacidad para adaptarse a los cambios en el mercado de la droga en la región, con el fin de compensar la pérdida de ingresos. De hecho, hay evidencia para sugerir que los carteles han respondido a una intensa ofensiva contra el narcotráfico en el país, profundizando su participación en actividades criminales alternativas como la trata de personas, el tráfico ilícito de migrantes, y la minería ilegal.
También han incursionado en nuevos mercados de drogas. Aprovechando los éxitos de la aplicación de la ley de Estados Unidos contra la producción de las metanfetaminas, los carteles mexicanos se han convertido en la principal fuente de metanfetaminas para los estados Unidos, aprovechando la laxitud de controles en la vecina Guatemala para producir la droga en cantidades industriales allí. Teniendo en cuenta la capacidad demostrada de los carteles mexicanos para compensar las pérdidas mediante la diversificación de sus portafolios criminales, la actual demanda (aunque reducida) de cocaína, así como la feroz competitividad global del narcotráfico, la situación de seguridad en México probablemente no experimente un gran cambio si la marihuana fuera legalizada en algunas partes de los Estados Unidos.