Las fotografías que aparecieron en la prensa costarricense eran del exportador italiano de frutas Salvatore Ponzo, con una barba cuidadosamente recortada y una sonrisa cortés, camisetas polo y gorra de béisbol con el logo de su empresa estampado. Muy distinto al enigmático Salvatore Ponzo de las fotografías de los medios italianos, que mira amenazador a la cámara, vestido con su chaqueta de cuero o camisetas ajustadas.