Argentina reincorporará agregados de seguridad en sus embajadas en varios países, lo cual confirma los esfuerzos del gobierno por detener el creciente tráfico de drogas y por hacer parte de la tendencia regional de intensificar la cooperación multilateral en contra del crimen organizado.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, ratificó la decisión que le permitirá al personal de las fuerzas de seguridad retomar sus puestos en embajadas en el extranjero y reiniciar la cooperación bilateral de Argentina en contra de los traficantes de droga, informó La Nación.
El informe dice que se reasignarán miembros de la policía militar en embajadas de países suramericanos, como Paraguay, Bolivia, Perú, Chile y Colombia, al igual que en Francia y China. La policía federal, que ya ha reiniciado su programa de entrenamiento en Estados Unidos, reasumirá sus labores en Brasil, México y España, mientras que la Guardia Costera Nacional representará al país en Londres y Paraguay.
El trabajo de los agregados de seguridad en estos países, que se encuentran a lo largo de varias rutas de tráfico de drogas, permitirá compartir inteligencia relevante y coordinar mejor los esfuerzos gubernamentales en contra del crimen organizado transnacional.
La red de agregados de seguridad de Argentina había disminuido severamente desde 2014, y fue suspendida totalmente el año pasado por la anterior administración.
Análisis InSight Crime
La reintegración de los agregados de seguridad es la más reciente de las medidas tomadas por la administración del presidente Mauricio Macri para fortalecer sus políticas de seguridad en contra del narcotráfico y el crimen organizado. Su anuncio se realizó el mismo día en que el gobierno proclamó el “Plan de seguridad fronterizo”, el cual busca mejorar el control de los flujos fronterizos por parte de las autoridades, con la ayuda de la Interpol, con el fin de que sea eficiente.
VEA TAMBIÉN: Cobertura sobre Argentina
Ambas medidas están en consonancia con la tendencia regional de incrementar la cooperación internacional en contra del crimen transnacional, como lo ilustra la creciente cooperación de las fuerzas de seguridad brasileñas con sus países vecinos. Esta tendencia muestra que los países son cada vez más conscientes de la necesidad de coordinar sus esfuerzos para frenar el crimen organizado que opera a través de las fronteras internacionales.
Los agregados de seguridad son centrales para estos trabajos de coordinación, ya que ellos permiten compartir información y experiencia relevantes. Como lo señaló La Nación, la policía militar de Argentina, que está inspirada por la ‘gendarmerie’ francesa, se intergrará a los esfuerzos conjuntos de Europa del sur y el Norte de África en contra del tráfico de drogas, a través del agregado ubicado en Francia. En cuanto a la policía federal, la cooperación con su homóloga brasileña ya le ha permitido ensayar las políticas de su vecino en las favelas en algunas zonas del área metropolitana de Buenos Aires.
Renovar la red de agregados parece ser un paso positivo en la lucha de Argentina contra la inseguridad a nivel nacional y contra el narcotráfico transnacional.