Las autoridades de Bolivia han arrestado al exjefe de la policía del país, lo cual destaca la corrupción generalizada que ha facilitado el surgimiento de Bolivia como epicentro del narcotráfico regional.
El general Óscar Nina, su esposa, su hija y su hijo han sido acusados de enriquecimiento ilícito y son sospechosos de colaborar con narcotraficantes, informó la BBC.
El ministro de Gobierno de Bolivia, Hugo Moldiz, dijo a los medios que las autoridades habían tenido "serias sospechas desde hace muchos años" de que Nina tenía vínculos con el narcotráfico, informó Opinión.
Nina fue nombrado jefe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico de Bolivia (FELCN) en enero de 2009 y le fue encargada la reestructuración de la fuerza después de que el presidente Evo Morales expulsara a la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA por sus iniciales en inglés) en 2008.
En 2010 se convirtió en jefe de la policía del país, pero fue despedido en 2011, poco después de que otro exjefe de la policía antinarcóticos de Bolivia, René Sanabria, fuera detenido en Panamá y trasladado a Estados Unidos para enfrentar cargos por tráfico de drogas.
Nina y su hijo fueron enviados a prisión preventiva, mientras que su esposa y su hija fueron dejadas en libertad bajo fianza, informó La Razón.
Según La Razón, el mismo día de la audiencia, la FELCN decomisó cerca de una tonelada de cocaína que iba a ser enviada desde Bolivia hacia el país africano de Burkina Faso a través de un puerto chileno. Un boliviano y dos ecuatorianos fueron detenidos en la redada.
Análisis de InSight Crime
Como InSight Crimen reveló en una investigación especial el año pasado, Bolivia está asumiendo un papel cada vez más importante en el comercio de drogas en la región, no sólo como productor de cocaína, sino también como país de tránsito y como base de operaciones para los actores criminales transnacionales de países como Colombia y Brasil.
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La corrupción —sobre todo en el poder judicial y en la policía— es una de las razones que explica el creciente papel de Bolivia en el comercio de droga. Un diputado de la Asamblea Legislativa le dijo a InSight Crime el año pasado que elementos corruptos de la policía estaban trabajando con narcotraficantes colombianos en la ciudad de Santa Cruz, mientras que un abogado aseveró que los acusados en ocasiones recurren a sobornos para liberarse de las condenas.
Hasta el arresto de Nina, René Sanabria había sido la cara de más alto perfil de la corrupción en el país, después de que un tribunal estadounidense lo condenara a 15 años de prisión por narcotráfico. Si bien el arresto de Nina muestra que esta corrupción ciertamente no terminó con la red de Sanabria, al menos sí muestra que las autoridades bolivianas están tomando medidas para abordar el problema, a diferencia del caso de Sanabria, cuyo arresto fue orquestrado por las agencias estadounidenses.