La muerte de un hombre de 38 años de edad, en un enfrentamiento entre criminales y la policía, eleva el número de secuestrados asesinados en Venezuela este año a 21; a medida que el secuestro no sólo se propaga rápidamente a través de Venezuela, sino que también evoluciona.
Lobsang Alberto Rodríguez recibió un disparo en la espalda por sus secuestradores después de que la policía se acercara a la casa donde se encontraba recluido mientras investigaba denuncias de comportamientos sospechosos en el municipio de Libertador, en el estado de Miranda.
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Las estadísticas policiales no oficiales indican que fue la vigésimo primer víctima de secuestro en ser asesinada este año, de 361 casos denunciados a la policía –lo que significa que las víctimas han sido asesinadas en el 5,8 por ciento de los casos en los que la policía está al tanto, informó El Nacional–.
Análisis de InSight Crime
Estadísticas confiables sobre el secuestro son difíciles de conseguir en Venezuela; en parte debido a que el crimen a menudo no se denuncia y las víctimas prefieren pagar en lugar de informar a la policía, y en parte porque el gobierno venezolano es reacio a divulgar información negativa sobre los problemas de seguridad.
No obstante, según la unidad de la policía de investigación, el CICPC, entre 1999 y 2011 hubo un aumento de 20 veces en los casos, de apenas 44 a 1.105. En 2012, hubo 1.970 secuestros en Venezuela, según un estudio realizado por el criminólogo Fermín Mármol García.
Las estadísticas no incluyen los llamados secuestros "express", donde las víctimas son retenidas por un periodo corto de tiempo -que varía desde unas pocas horas a tres días- mientras que los secuestradores limpian sus cuentas bancarias o exigen comparativamente pequeños rescates. Investigación de campo de InSight Crime, realizada en 2010, sugiere que tan sólo en Caracas hay alrededor de 20 a 40 secuestros express al día.
Los criminales de Colombia -alguna vez la capital del mundo del secuestro- han jugado un papel importante en el aumento de la criminalidad en Venezuela. Las bandas colombianas de secuestradores han estado emigrando a través de la frontera, probablemente motivadas por penas más severas para el secuestro en su país de origen. Inicialmente se concentraron en las regiones fronterizas, pero ha habido indicios recientes de que las redes de secuestro binacionales, que involucran a criminales de ambos países, han estado operando en el interior del país.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, también ha resaltado el papel de las fuerzas de seguridad corruptas en el secuestro, declarando en junio de este año que el 90 por ciento de los secuestros en Caracas estaban vinculados a la policía local.