La policía boliviana incautó 5.000 caimanes bebé y 500 pieles listas para ser contrabandeados a Brasil, evidencia del comercio regional de contrabando de vida silvestre.
Los reptiles fueron encontrados en camiones que viajan desde San Matías, un pueblo en la frontera con Brasil, e iban camino a ser vendidos en la ciudad suroriental de Santa Cruz, informó The Associated Press. Los cocodrilos bebé son muy populares para la venta como mascotas exóticas y por su carne, dijo la agencia, mientras que Prensa Libre informó que las pieles tienen un valor de US$18.000 y serían usadas para fabricar zapatos en Brasil.
Las autoridades creen que los eco- traficantes están ganando millones de dólares en el comercio ilegal de vida silvestre en Bolivia, según Prensa Libre, que estima que más de 60.700 animales de 119 especies diferentes han sido contrabandeados fuera del país durante los últimos cinco años.
Análisis de InSight Crime
Se cree que el comercio de pieles de reptiles para zapatos y bolsos es responsable de que alrededor del 85 por ciento de los cocodrilos del mundo se conviertan en especies en peligro de extinción. La ONU estima que entre 1,1 millones y 1,8 millones de pieles de cocodrilo fueron comercializadas anualmente entre 1999 y 2008.
Gran parte de ese comercio es legal, regulado en virtud de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres. No obstante, el comercio ilegal de vida silvestre es enorme, con estimaciones de ingresos globales anuales que oscilan entre US$20 mil millones y US$70,5 mil millones al año. Además de ser asesinados por los artículos de moda y productos de medicina alternativa, miles de animales son vendidos como mascotas exóticas, siendo China y Estados Unidos los mercados más grandes.
Es un negocio especialmente lucrativo en Suramérica, hogar de algunos de los países más biodiversos del mundo. Más de 46.000 animales capturados ilegalmente, fueron capturados en Colombia en 2012. Traficantes de animales comparten rutas con el narcotráfico, según un informe de 2009 de Reuters. Santa Cruz, a donde supuestamente iban los caimanes, se ha convertido en un centro para el narcotráfico regional y la actividad criminal en los últimos años.