La policía de Bolivia ha descubierto cocaína químicamente modificada, para ser inodora y flexible, en un envío de instrumentos musicales que se dirigían a Europa, en lo que parece un nuevo desarrollo en técnicas de contrabando utilizadas para burlar a los cuerpos policiales.
Marco Ballón, director de la policía antinarcóticos de Bolivia (FELCN), en el departamento de Cochabamba, en el centro del país, anunció la desarticulación de una banda criminal que había ocultado cocaína en una mandolina, pinturas e instrumentos musicales autóctonos, que tenían como destino España, informó La Razón. La cocaína, que había sido procesada de manera "peculiar", estaba "en estado húmedo y bastante flexible" por lo que pudo ser fácilmente moldeada en diferentes formas, dijo Ballon.
Según Los Tiempos, la mandolina contenía 165 gramos de cocaína en un compartimiento oculto, que Ballon dijo que "era imperceptible porque el sonido del instrumento era perfecto, además de que no desprendía ningún olor".
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Tres personas fueron detenidas en la investigación sobre el caso de la cocaína, y la policía sospecha que las personas también pudieron haber estado involucradas en algún tipo de estafa, después de encontrar ladrillos de bicarbonato de sodio que probablemente hacían pasar como cocaína a los posibles compradores.
Análisis de InSight Crime
Aunque no está claro si esta cocaína "flexible" e "inodora" es completamente nueva, su desarrollo sugiere que los traficantes de drogas tenían un respaldo financiero significativo y que contaban con la ayuda de científicos expertos para adulterar con éxito el producto.
En los últimos años, los traficantes han mostrado un considerable ingenio. La cocaína también ha sido alterada químicamente para disolverla en cocaína líquida, facilitando así su tráfico. Dicho método fue descubierto en enero en Bolivia, donde las mulas de droga tragaban pequeñas bolsas de cocaína líquida -que se pueden llevar en grandes cantidades y son mucho más difíciles de detectar por los rayos X- con el fin de evadir la seguridad del aeropuerto.
También se han incautado envíos masivos de cocaína líquida en Venezuela y Chile, mientras que un caso reciente en Colombia registró tres toneladas de cocaína líquida, que estaba mezclada con aceite para transformadores y estaba oculta en un transformador. La cocaína líquida también se ha congelado, como se vio en 2013, cuando las autoridades peruanas encontraron casi cuatro toneladas de cocaína líquida congelada en contenedores.
Como pone de relieve este caso reciente, aunque las autoridades de la región han tenido éxito en la identificación de nuevos métodos para adulterar y ocultar la droga, las organizaciones de traficantes siguen siendo extremadamente hábiles en el desarrollo de formas cada vez más sofisticadas para evadirlos.