Según un comité del Congreso, que se encarga de las cuestiones de seguridad pública, el 80,5 por ciento de todos los crímenes en Honduras son cometidos con armas no registradas, mientras el país se prepara para debatir una reforma a las leyes de control de armas.
Un miembro del comité dijo a El Heraldo que sólo el 23 por ciento de las armas que circulan en Honduras están registradas.
Esta cifra es ligeramente inferior a la estimación anterior, publicada por el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras (CONADEH), que establecía que sólo el 30 por ciento del total aproximado de 850.000 armas de fuego en el país, están registradas oficialmente.
Las cifras fueron publicadas debido a que el Congreso de Honduras está listo para debatir esta semana una legislación de control de armas más estricta. Las reformas propuestas podrían reducir el número de armas de fuego que un ciudadano puede comprar, de cinco a una sola. Las reformas también podrían exigir a los ciudadanos a solicitar (y pagar) por dos licencias independientes - una para comprar un arma de fuego, y otra para portarla -. Las licencias serán válidas durante un máximo de tres años. Las tarifas de solicitud podrían traer algunos beneficios importantes para el gobierno de Honduras, como señala El Heraldo.
La propuesta reforma a la ley de control de armas también exigiría una licencia especial, con el fin de adquirir y utilizar material explosivo.
La ley incluye excepciones especiales, que hacen que sea más fácil para políticos, jueces, fiscales y ex funcionarios del gobierno, solicitar las nuevas licencias para el porte de armas.
Análisis de InSight Crime
El paso de un conjunto de leyes de control de armas más estrictas en Honduras, posiblemente no será tan difícil como hacerlas cumplir. Como lo indican las cifras publicadas por el comité del Congreso sobre la seguridad pública, el Registro Nacional de Armas no está haciendo un buen trabajo en la regulación.
Se cree que elementos corruptos de la policía y el ejército venden armas en el mercado negro; un hecho que contribuye a la cantidad de armas no registradas que circulan en Honduras. En otras ocasiones, las armas en manos del gobierno simplemente han desaparecido. Si el Congreso termina aprobando regulaciones de armas más estrictas, sólo será un paso simbólico hacia adelante si el gobierno no aborda las otras dinámicas que impulsan el comercio ilícito de armas.