Las autoridades estadounidenses han arrestado a 13 personas, acusadas de estar involucradas en una red que obligaba a mujeres mexicanas a ser esclavas sexuales en Nueva York y Nueva Jersey, resaltando cómo Estados Unidos sigue siendo el principal destino de tráfico para las víctimas que provienen desde México y la región.
Los agentes federales arrestaron a los sospechosos y rescataron a las mujeres tras la redada en cuatro burdeles en Yonkers, Queens, Poughkeepsie y Newburgh. Según los fiscales, la red explotaba docenas de mujeres, que eran traídas principalmente de Tenancingo, en el estado de Tlaxcala, cerca a Ciudad de México.
Las mujeres presuntamente fueron persuadidas con promesas de una mejor vida, pero tras su llegada, eran objeto de amenazas y abuso sexual, y obligadas a ejercer la prostitución. Algunas eran llevadas a granjas en Nueva Jersey donde eran obligadas a tener relaciones sexuales con unos 25 trabajadores agrícolas al día, mientras que otras trabajaban en burdeles en zonas pobres de Nueva York.
Análisis de InSight Crime
Tenancingo es un importante centro para el tráfico sexual, con aproximadamente 1.000 de sus 10.000 habitantes involucrados en el comercio, según la BBC. Los traficantes de la ciudad atraen a mujeres de varias partes de México con pretensiones románticas o promesas de una mejor vida. Muchas mujeres inicialmente son traficadas a Ciudad de México y desde allí, hacia Estados Unidos, siendo Queens, en Nueva York, un destino común.
Aunque la trata de personas y el secuestro de migrantes han sido tradicionalmente el principal problema de México en esta zona, el tráfico de personas también se ha convertido en un problema serio. En 2012, una congresista mexicana afirmó que 800.000 adultos mexicanos y 20.000 niños son traficados cada año con fines de explotación sexual, mientras que un prominente grupo de Derechos Humanos identificó 15 estados en México como centros para el tráfico de personas en 2011.
Un informe de 2012 del Servicio de Investigación del Congreso (Congressional Research Service) declaró que Estados Unidos es uno de los cinco principales países de destino de las víctimas de tráfico sexual de Latinoamérica; siendo España, Italia, Portugal y Japón los otros cuatro.