Un ex comandante militar de Guyana ha dado la voz de alerta de que el país está en peligro de convertirse en un "narco-Estado", debido al surgimiento de vínculos con el crimen organizado de Europa y a su creciente papel como país de tránsito.
David Granger, un excomandante de la Fuerza de Defensa de Guyana, y líder de la oposición política, le dijo al Congreso durante el debate presupuestario que "Guyana está caminando dormida, paso a paso, hacia un narco-Estado", informó Guyana Times.
"El narcotráfico es el motor del crecimiento que está impulsando la economía del país", dijo. Granger se refirió a los problemas que el narcotráfico ha generado en el pequeño país -ubicado al noreste de Suramérica- incluyendo la guerra entre pandillas, lavado de dinero, robos a mano armada y asesinatos.
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El excomandante dijo que los narcotraficantes del país tenían fuertes vínculos con las familias de la mafia Gambino y Bonanno en Nueva York, así como la organización mafiosa más poderosa de Italia, la 'Ndrangheta.
También describió cómo las áreas remotas del país –que limitan con Brasil, Venezuela y Suriname- se han convertido en los principales corredores de armas y narcotraficantes.
Análisis de InSight Crime
La ubicación de Guyana, que ofrece acceso a los países de África Occidental, los cuales se han convertido en puntos de tránsito clave para los grupos criminales de Latinoamérica, junto con sus porosas fronteras con los principales países de tráfico de drogas, lo convierten en un punto de tránsito ideal para los traficantes.
La situación cada vez más preocupante del país fue señalada en un informe de 2012, el cual encontró que el aumento en los homicidios estaba relacionado con las pandillas callejeras, la presencia de grandes organizaciones de tráfico de drogas, y los vínculos criminales con la clase política y las fuerzas de seguridad. En un caso reciente, las autoridades estadounidenses e italianas desmantelaron una operación de tráfico de drogas de mil millones de dólares, que utilizaba una empresa de transporte de Guyana para transportar cocaína y heroína en los envíos de fruta y pescado a un puerto en Calabria, Italia, donde está ubicada la 'Ndrangheta.
La dura evaluación de Granger, de que Guyana se está convirtiendo en un "narco-Estado", fue probablemente un llamado a los políticos del país y a la policía, que a menudo son corruptos o no tienen la voluntad política para enfrentar estos problemas. Guyana además se ve afectada por el hecho de que cuenta con recursos limitados para combatir el narcotráfico, según ha destacado el presidente Donald Ramotar, quien recientemente solicitó la asistencia internacional para investigar el caso de Italia.
Los vecinos de Guyana, Surinam y la Guayana Francesa, son países que en gran medida son pasados por alto en Suramérica como rutas principales de tránsito de drogas. Los tres son ex colonias europeas, y probablemente estos lazos culturales históricos los seguirán uniendo con el continente, contribuyendo a su atractivo para el tráfico de drogas, para mover los envíos con destino al mercado en expansión de Europa.