El Informe sobre la Estrategia Nacional para el Control de Drogas de 2013 de la Casa Blanca (National Drug Control Strategy Report) sostiene que el enfoque del año anterior tenía como base la prevención y el tratamiento como medios para reducir la demanda de drogas ilegales, y pone mayor énfasis en el abuso de medicamentos recetados.
La Estrategia Nacional para el Control de Drogas de 2013 se basa en los objetivos establecidos en primera estrategia de la administración Obama, publicados en 2010. Los dos objetivos principales son la reducción del consumo de drogas ilícitas (incluyendo la reducción del número de usuarios crónicos de drogas en un 15 por ciento) y la reducción de las consecuencias del consumo de drogas (la reducción de las muertes relacionadas con las drogas en un 15 por ciento) para 2015.
El grueso de la estrategia está dedicado a la prevención, el tratamiento y la intervención temprana, aunque también se detallan las estrategias tradicionales de del uso de la fuerza pública asi como los esfuerzos del lado de la oferta nacional e internacional. El informe también da prioridad a dos enfoques de políticas: la reducción de la conducción bajo el efecto de las drogas y la prevención del abuso de medicamentos recetados.
Análisis de InSight Crime
El enfoque en el abuso de medicamentos recetados, que un informe del Senado de Estados Unidos de 2012 llamó "el problema de más rápido crecimiendo de las drogas" en la nación, ilustra cómo ha crecido la preocupación por este tema en los últimos años - junto con el temor de que los carteles mexicanos de la droga puedan aprovechar esta oportunidad de mercado.
El informe continúa defendiendo la retórica de la "tercera vía" de la administración Obama, la cual dice estar trazando un camino entre la legalización y la "guerra contra las drogas". No obstante, los defensores de la reforma a la legislación sobre drogas se mantienen escépticos sobre si las palabras de la administración coinciden o no con sus políticas. La Drug Policy Alliance expresó preocupación de que la propuesta de la estrategia de ampliar los tribunales especializados en drogas, signifique que la adicción a las drogas sigue siendo tratada como un problema de justicia penal en lugar de un problema de salud pública.
Lea el informe completo aquí (pdf).