En noticias eclipsadas por la captura del líder de los Zetas, Z40, las autoridades mexicanas anunciaron la detención de Víctor Hugo Delgado Rentería, alias “El Tornado”, líder del Cartel Jalisco – Nueva Generación (CJNG), en el estado de Jalisco.
El 18 de julio, el Procurador General de México, Jesús Murillo Karam, anunció que las fuerzas federales habían arrestado a Delgado el 10 de julio en Guadalajara, informó el New York Times. Delgado está acusado de matar a 12 narcotraficantes cuyos cuerpos decapitados fueron encontrados en Yucatán en 2008.
Otro miembro del CJNG, Domingo Medina Moguel, también fue arrestado, informó El Economista. Tanto Delgado como Medina fueron detenidos el 21 de marzo de 2010, pero fueron puestos en libertad meses después.
Análisis de InSight Crime
Al igual que con el arresto de Z40, las autoridades mexicanas estaban prevenidas sobre el anuncio de la captura de Delgado: la Procuraduría General esperó más de una semana para contar a la prensa que Delgado había sido detenido, y se negó a ofrecer más detalles. Pese a que la captura de dos importantes narcotraficantes en tan poco tiempo es un éxito para la administración de Peña Nieto, el presidente ha seguido haciendo énfasis públicamente en que su objetivo es reducir la violencia en lugar de arrestar capos.
En Jalisco, no obstante, la violencia sigue siendo alta. Según datos del Observatorio Nacional Ciudadano de México, los homicidios violentos en Jalisco aumentaron un 6,2 por ciento en el primer trimestre de 2013, en comparación con el mismo periodo de 2012. Esto significa que para 2013, Jalisco tuvo el tercer mayor número de homicidios de los 32 estados del país, después de Guerrero y Chihuahua.
Una gran parte de esta violencia se deriva del hecho de que varias pandillas están luchando por el control de Jalisco. El CJNG, el cual es liderado por antiguos socios del capo muerto del Cartel de Sinaloa, Ignacio “Nacho” Coronel, es un grupo regional aliado con el Cartel de Sinaloa, pese a que en agosto las autoridades estatales anunciaron que los grupos se habían separado. En Jalisco y otros estados a lo largo de la costa pacífica de México, el CJNG ha luchado contra los Zetas y su grupo aliado local del Cartel del Milenio, así como contra los Caballeros Templarios, los remanentes de la Familia Michoacana y la pequeña pandilla local de la Resistencia.