La canciller mexicana ha culpado a las laxas leyes de control de armas en Estados Unidos por la inundación de armas ilegales en el país, en una valoración inusualmente directa del impacto de la política interna estadounidense en la violencia y el crimen organizado en México.

En su alocución en la Segunda Conferencia de Estados Parte del Tratado sobre el Comercio de Armas, la secretaria de relaciones exteriores Claudia Ruiz Massieu señaló que la laxitud en las leyes para el control de armas en Estados Unidos han afectado las restricciones aplicadas por México a la venta y posesión de armas.

“Estos esfuerzos de [México] se ven limitados por las miles de armas ilegales que llegan cada año a nuestro país procedentes de nuestra frontera norte”, comentó.

Según la ministra, las autoridades mexicanas han rastreado el 70 por ciento de las armas de fuego decomisadas en el país hasta compradores o distribuidores en Estados Unidos. Añadió que el 60 por ciento fueron fabricadas en Estados Unidos en comparacción con 30 por ciento de manufactura europea y 10 por ciento del resto del mundo.

Ruiz también hizo notar la facilidad con la que pueden comprarse armas en Estados Unidos, y destacó la existencia de más de 9.000 tiendas de armas y 23.000 licencias expedidas para ventas de armas en ferias de esta industria y en internet tan sol oen los cuatro estados lindantes con México. Si incluso los supermercados tienen inventarios de armas, es “tan fácil adquirir armas como un litro de leche o una caja de cereal”, comparó.

También criticó la legislación estadounidense que levanta las restricciones a la venta de armas de asalto de grueso calibre, que, dijo, representan 23.000 de las 40.000 armas retiradas del servicio activo en México entre diciembre de 2012 y julio de 2016.

“Esto les da a las organizaciones criminales transnacionales un enorme poder de fuego que afecta tanto a México como a Estados Unidos y lo hace un reto binacional”, observó.

Sin embargo, la ministra elogió al presidente estadounidense Barack Obama por sus “tenaces y sinceros” esfuerzos para reforzar las regulaciones de control de armas, y resaltó el fortalecimiento de las iniciativas bilaterales que están adelantando los dos países para controlar el negocio de las armas, así como el intercambio de información entre sus diferentes organismos.

Análisis de InSight Crime

Como lo han determinado numerosos estudios, las armas compradas legalmente en Estados Unidos han sido por largo tiempo el sostén de los poderosos arsenales amasados por los carteles de la droga y las redes del crimen organizado en México. Sin embargo, Ruiz Massieu olvidó mencionar que un número importante de armas que circulan en el mercado negro se extraen de las fuerzas de seguridad de México.

VEA TAMBIÉN: Traficantes de armas: Tráfico de armas hacia México

Aunque está más que documentado el rol de las leyes sobre armas en Estados Unidos en el abastecimiento de los grupos criminales al sur de la frontera, cualquier intento por introducir hasta las más leves reformas enfrenta una oposición feroz. Aunque Ruiz elogia al presidente Obama por sus esfuerzos por hacer aprobar la legislación para el control de armas, la realidad es que ha salido derrotado en cada paso, aun cuando la legislación que propuso ofrecía restricciones mínimas sobre la venta y la posesión de armas.

Aunque el control de armas es un tema políticamente explosivo en Estados Unidos, puede haber también un componente económico en la resistencia a los esfuerzos por controlar el negocio de armas entre fronteras. Según un estudio realizado por el Instituto Igarapé en 2013, casi la mitad de los comerciantes de armas de fuego en Estados Unidos dependen económicamente del tráfico transfronterizo.

La legislación para el control de armas no es el único obstáculo para evitar el tráfico transfronterizo de armas; la detección y el procesamiento de los traficantes de armas en Estados Unidos también se ve afectado por las debilidades institucionales de las autoridades responsables.

9 respuestas a “Control de armas en EEUU alimentan violencia criminal en México: Ministra”