Una nueva iniciativa está enseñando a los miembros de las pandillas de El Salvador competencias profesionales como agricultura y carpintería, en una señal alentadora de los esfuerzos del gobierno para rehabilitar a los pandilleros, en lugar de sólo utilizar medidas represivas para hacer frente a la criminalidad.
El 29 de octubre, más de 200 miembros encarcelados de la pandilla Barrio 18 comenzaron a trabajar en una granja penitenciaria en la ciudad de Ilobasco, en el centro de El Salvador, donde aprenderán competencias profesionales como agricultura, confección, carpintería y construcción, informó El Mundo.
Se espera que unos 400 miembros encarcelados de la pandilla rival Mara Salvatrucha (MS13) ingresen al programa en los próximos días. En total, la iniciativa -que es administrada por el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública- tiene como objetivo beneficiar al menos a 800 miembros de pandillas, informó La Prensa Gráfica.
El programa también ofrecerá educación básica, servicios de salud y tratamiento psicológico, así como un curso de mecánica patrocinado por Estados Unidos, según El Mundo.
Análisis de InSight Crime
El programa de formación profesional para los miembros encarcelados de las pandillas es una señal alentadora en un país invadido por la violencia de las pandillas. La inauguración de la granja penitenciaria es la más reciente de una serie de iniciativas del gobierno salvadoreño para encontrar alternativas a las estrategias de seguridad de mano dura, que sólo han servido para empeorar el problema de las pandillas en el país. En septiembre, el presidente Salvador Sánchez Cerén anunció la creación de un Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y Convivencia, que incluirá miembros de los sectores público y privado en la creación de un plan de acción para reducir el crimen y la violencia.
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Además de prestar un enfoque más progresivo a la violencia de las pandillas, la nueva iniciativa también está diseñada para reducir el hacinamiento en las cárceles de El Salvador. Según el ministro de Justicia y Seguridad Pública Benito Lara, las cárceles del país actualmente están en un 325 por ciento por encima de su capacidad, planteando riesgos de seguridad y problemáticas de derechos humanos.
Vale la pena señalar que, aunque Lara anunció planes para integrar las cárceles en julio, los miembros de las dos pandillas más grandes del país, Barrio 18 y MS13, estarán divididos en diferentes secciones de la granja penitenciaria. Lo anterior está en consonancia con la polémica política de seguridad del gobierno, implementada en 2004, que dividió a los presos de las diferentes pandillas, una estrategia criticada por fortalecer a los grupos criminales.