Según información de inteligencia de la policía, las pandillas de El Salvador están diversificando sus actividades hacia actividades como préstamos, servicios de seguridad y negocios legales, que los oficiales dicen que es señal de que los grupos criminales están utilizando la tregua entre pandillas para expandir su control sobre las comunidades.
Los informes policiales obtenidos por La Prensa Gráfica sugieren que las pandillas en el departamento (provincia) de San Vicente están desarrollando una serie de nuevas estrategias para ampliar su influencia y riqueza. Entre estas, están ofreciendo préstamos al cinco por ciento de interés para las pequeñas empresas, la apertura de su propio negocio en sectores como el comercio de moto-taxis e incluso la organización de reuniones con las comunidades para informar que las pandillas son ahora responsables de la "seguridad ciudadana".
Los informes citan testimonios de pandilleros, que dicen que desde que se firmó la tregua entre la Mara Salvatrucha (MS13) y Barrio 18 el año pasado, facciones locales han operado bajo órdenes de no llamar la atención matando o extorsionando en sus propios territorios, pero siguen siendo libres de hacerlo en otros lugares.
Según un comandante de la policía no identificado, citado por La Prensa Gráfica, las pandillas ya se están preparando para el fin de la tregua, usando el alto al fuego para almacenar armas y vehículos y diversificar sus fuentes de ingresos.
Análisis de InSight Crime
Suponiendo que los informes de inteligencia de la policía citados por La Prensa Gráfica son confiables, estos apuntan a una evolución interesante en el modus operandi de las pandillas, motivadas por el deseo de buscar nuevas fuentes de ingresos.
Si, como sugiere la policía, se trata de un complot para profundizar su control sobre las comunidades y es parte de una estrategia para usar la tregua entre pandillas para adquirir fuerza, entonces este es un desarrollo extremadamente preocupante y alimenta los peores temores que rodean la tregua.
Una lectura más optimista sería que la tregua ha llevado a las pandillas a buscar la diversificación de sus actividades criminales violentas. No obstante, incluso si este es el caso, este desarrollo debe ser monitoreado cuidadosamente, ya que actividades tales como la seguridad y los préstamos pueden deteriorarse rápidamente hacia la criminalidad y la violencia si se deja en manos de pandilleros que están acostumbrados a operar en el mundo criminal.