Según informes, las autoridades paraguayas han incautado más de una docena de aeronaves que se creen eran usadas para traficar drogas, lo que tal vez es hasta el momento la señal más clara del papel clave de este país como punto de tránsito en el puente aéreo de cocaína en la región.
En una operación conjunta llevada a cabo el 6 de julio, funcionarios del Ministerio Público paraguayo y de la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD) incautaron 18 aviones en aeropuertos localizados en la ciudad fronteriza de Juan Pedro Caballero, en el oriente del país, y en la ciudad de Luque, que hace parte del área metropolitana de la capital Asunción, informó ABC Color.
Según el fiscal antidrogas Marcelo Pecci, es probable que los aviones fueran usados por grupos criminales para actividades del narcotráfico. Se sospecha que una red de funcionarios consiguieron los documentos falsos necesarios para permitir que las aeronaves —presuntamente traídas desde Estados Unidos— ingresaran a Paraguay, informó EFE.
Análisis de InSight Crime
Si bien Paraguay es el mayor productor de marihuana en Suramérica, existe la posibilidad de que las aeronaves fueran usadas para introducir ilegalmente cocaína de países productores —como Bolivia y Perú— a Brasil.
Desde 2011, un representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) advirtió sobre la importancia de Paraguay como punto de parada en el denominado puente aéreo de la cocaína, que conecta a Bolivia y Perú con Brasil. En noviembre de 2012, las autoridades paraguayas incautaron cinco presuntos narcoaviones y cerca de dos toneladas de cocaína en el departamento fronterizo de Canindeyú, ubicada al oriente del país. Paraguay tiene instalado un radar secundario de vigilancia para detectar el tráfico aéreo; sin embargo, el director de la Dirección Nacional de la Aeronáutica Civil ha afirmado que éste no es lo suficientemente sensible para detectar vuelos de baja altura cargados con drogas.
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Otra posibilidad es que los aviones tenían como fin proveer a narcotraficantes en otros países. El director de la agencia antidrogas del país ha dicho que Paraguay es un importante proveedor de aviones viejos para organizaciones criminales.
Las incautaciones seguramente reavivarán el debate sobre si Paraguay debería implementar una polémica ley que les permitiría a las fuerzas de seguridad derribar aviones que son sospechosos de llevar drogas. El Senado paraguayo aprobó la ley el pasado octubre, pero en febrero la Cámara de Diputados eliminó de la ley el apartado sobre el derribo de aeronaves.
Las denuncias de que una red de funcionarios corruptos facilitaron las actividades de tráfico aéreo de drogas es otro ejemplo del profundo involucramiento de las autoridades paraguayas en el mercado de drogas del país. Varios congresistas y numerosos miembros de la policía han sido implicados en escándalos de narcocorrupción en los últimos meses.