Las autoridades mexicanas han alertado sobre un incremento de los decomisos de laboratorios de drogas en el estado de Sinaloa, señal que de las organizaciones criminales pueden estar diversificando la producción de drogas y las actividades de tráfico para concentrarse en las drogas de síntesis.
El comandante militar de la zona Rogelio Terán Contreras declaró recientemente que el número de laboratorios de drogas sintéticas en Sinaloa va en aumento, informó El Universal.
Según estadísticas oficiales, las autoridades destruyeron 47 de estos laboratorios clandestinos en 2014. Esa cifra se elevó a 80 en 2015, y en lo que va corrido del año se han destruido por lo menos 55, lo que indica que para el fin del año el total de 2016 podría igualar o superar el total de 2015.
Los químicos precursores usados para producir las drogas sintéticas se importan generalmente por medio de los puertos marítimos del país, informó El Universal. Y la mayoría de los narcóticos producidos en estos laboratorios tienen como destino la exportación a Estados Unidos.
Terán explicó que la proliferación de laboratorios de drogas ha supuesto una carga para los recursos de las autoridades y las fuerzas de seguridad.
Según El Sol de México, el trabajo forense y el desmantelamiento de cada laboratorio le cuesta entre US$50.000 y US$100.000 a la Procuraduría General de la República. Además, debe desplegarse soldados para vigilar los laboratorios durante el proceso, que puede demorar hasta tres meses.
Análisis de InSight Crime
El aumento de las redadas a laboratorios de drogas sintéticas en Sinaloa —uno de los tres estados que conforman el “Triángulo Dorado” de México, principal región productora de marihuana y amapola de opio— podría indicar que las organizaciones criminales de la región buscan diversificar sus actividades relacionadas con estupefacientes. Los grupos criminales mexicanos ya han ido incrementando la producción de opio para compensar los menores ingresos por marihuana. Por esta razón, es posible que recurran a las drogas sintéticas como fuente alternativa de ingresos.
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Pese a que las autoridades puedan estar destruyendo un mayor número de laboratorios de drogas en Sinaloa, datos recientes del gobierno mexicano muestran que los decomisos en el país de una de las drogas sintéticas más comunes, las metanfetaminas, han caído en picada. Según un informe reciente, los decomisos de metanfetaminas en México cayeron 99 por ciento este año en comparación con el anterior.
De otro lado, el informe anual más reciente de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) indica que la producción de metanfetaminas en México puede haberse duplicado desde 2009. Y la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA) informa que los decomisos de metanfetaminas hechos por las autoridades fronterizas estadounidenses se han incrementado en forma constante en los últimos años (pdf), una señal más del incremento en la producción de los grupos del crimen mexicano. La DEA también informó que hay evidencia que indica que puede estar creciendo el consumo de metanfetaminas en Estados Unidos, lo que da peso a la noción de que las organizaciones criminales mexicanas pueden estar respondiendo a cambios en la demanda del mercado de estupefacientes.