Más de 100 policías han sido asesinados sólo en Caracas en lo que va corrido de 2015. Sin embargo, en la última semana de septiembre la violencia contra los policías de Venezuela tomó nuevas dimensiones, pues se han presentado cinco ataques de granada en tres días.
El más agresivo fue un ataque a la Policía Municipal de Baruta en Caracas oriental, cuando hombres en motocicleta lanzaron dos granadas a un puesto de control temporal (“alcabala”) e hirieron a ocho agentes y cuatro civiles. Hubo otras contra la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) en las cercanías de Caracas, contra una estación de policía en Cuarico, y contra una estación de la policía del estado de Miranda.
El portal de noticias EfectoCocuyo.com ha contado al menos 27 “sucesos con granadas” desde enero de este año.
Este artículo fue publicado originalmente por Venezuela Politics and Human Rights y es publicado y traducido con permiso. Vea el original aquí.
El 30 de septiembre, la fiscal general Luisa Ortega Díaz dijo que su despacho está investigando los ataques y centrándose en el origen de los explosivos, dado que se cree que las granadas de mano han sido obtenidas en depósitos de municiones de las fuerzas armadas.
El líder opositor Capriles Radonski ha pedido públicamente al ministro de Defensa, el general Vladimir Padrino López, que explique cómo es posible que las granadas de mano, que se supone que deben ser posesión exclusiva de las fuerzas armadas, están llegando a manos de los ciudadanos corrientes.
VEA TAMBIÉN: Noticias y perfiles de Venezuela
Algunos policías han especulado que los ataques tienen que ver con la aparente herida o muerte del líder de una banda criminal, José Antonio Tovar “El Picure”, poco antes de los ataques. Se sabe que la banda de Tovar estuvo implicada en un ataque con granada el 5 de julio contra una estación de policía en el estado de Aragua.
De hecho, el gobierno afirma que estos ataques demuestran la eficacia de la Operación de Liberación del Pueblo (OLP). El diputado a la Asamblea Nacional Fredy Bernal lo calificó como "la respuesta del crimen organizado" al Operativo de Liberación del Pueblo.
Cuando el presidente Nicolás Maduro regresó de la Asamblea General de las Naciones Unidas dijo que los ataques fueron actos de terrorismo de extrema derecha. “En estos días enloqueció la derecha, mientras yo estaba en Nueva York […] defendiendo nuestra paz y soberanía”.