Las autoridades de Venezuela han capturado a 43 personas acusadas de intentar engañar al sistema de control de moneda extranjera para beneficiarse en el mercado negro, una consecuencia inevitable de las políticas económicas del gobierno y los controles de divisas.
La Comisión de Administración de Divisas (Cadivi), el organismo que supervisa los estrictos controles sobre la compra y el uso de los dólares por parte de los venezolanos, dijo que los individuos habían sido sorprendidos "in fraganti" falsificado documentos con el fin de acceder a divisas extranjeras, informó la agencia española de noticias EFE. Los “grupos inescrupulosos" habían hecho grandes ganancias, dijo el presidente de Cadivi José Khan.
Edmée Betancourt, hasta la semana pasada presidente del Banco Central de Venezuela, afirmó en una entrevista reciente que Cadivi había permitido a sectores de empresas ficticias a acceder a miles de dólares, informó EFE.
Análisis de InSight Crime
Las actividades criminales suelen llenar una necesidad. En este caso, es la necesidad de dólares para la supervivencia en un lugar donde la moneda local está completamente fuera de sintonía con la realidad. El tipo de cambio oficial es de 6,5 bolívares por dólar, el cambio en el mercado negro está más cerca de los 30 bolívares por cada dólar.
No es sorprendente que el comercio ilegal de dólares se haya disparado. Los grupos criminales e individuos han encontrado una gran cantidad de maneras de tomar ventaja de esto –por lo general en esquemas donde se procura usar dólares para viajar al extranjero o a través de empresas fachada antes de venderlos en el mercado negro para obtener una ganancia enorme–.
Hugo Chávez impuso un estricto control en 2005, limitando la cantidad en moneda extranjera que los venezolanos podrían utilizar anualmente. Según las cuotas más recientes, los venezolanos que viajan al extranjero pueden acceder a US$2.500 en una tarjeta de crédito por año y US$500 en efectivo. Cadivi también permite a los ciudadanos gastar US$400 anuales para comprar cosas en línea en dólares. Los importadores, por su parte, pueden comprar bonos del gobierno en dólares o comprar mercancías en dólares a través de transacciones en bancos autorizados, junto con todos los procedimientos burocráticos engorrosos que esto implica.
VEA TAMBIÉN: Perfiles y noticias de Venezuela
Los controles fueron impuestos en un intento por detener la fuga de capitales, al obligar a los inversores a buscar oportunidades nacionales a medida que el comercio en dólares se volvió difícil o imposible –al igual que mantener estable el precio de la moneda nacional–. No obstante, la fuga de capitales ha continuado sin cesar, mientras que un aumento masivo de los ingresos del petróleo infló el valor del bolívar, por lo que las exportaciones no competitivas (un ejemplo clásico de la "enfermedad holandesa"), a su vez, llevaron al gobierno a seguir disminuyendo el valor oficial del bolívar.
A medida que el bolívar ha perdido cada vez más su valor, y la industria manufacturera ha disminuido seriamente (otro de los síntomas de la enfermedad holandesa), lo que lleva a una escasez de productos básicos y la enorme inflación de los precios, conseguir dólares se ha convertido en algo cada vez más importante para los venezolanos.