En noviembre pasado, las elecciones en Venezuela fortalecieron el dominio del presidente Nicolás Maduro y su familia en varias regiones estratégicas para las economías criminales y los grupos armados con presuntos vínculos con su gobierno.

Los aliados de Maduro pronto asumirán el poder en varios estados, especialmente en Apure y Táchira en la frontera con Colombia, así como en Bolívar, centro minero del país. Además, su principal rival político dentro del régimen, Diosdado Cabello, perdió varios aliados clave, como los gobernadores de Zulia y Apure, lo que fortalece aún más el mando de Maduro.

Los resultados electorales en otras plazas también trajeron consigo varios cambios adicionales, todos los cuales no son favorables a la administración actual.

A continuación, InSight Crime analiza las principales implicaciones de las elecciones para la criminalidad.

1. La victoria de la oposición en Zulia debilita a la megabanda Los Leal

En el estado Zulia, el candidato opositor de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Manuel Rosales, derrotó al candidato del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) Omar Prieto con una votación del 56,90 frente a 36,06 por ciento. La derrota de Prieto probablemente representará un revés para una de las pandillas más conocidas de la región, Los Leal, que se ha beneficiado del gobierno de Prieto.

Hay bastantes evidencias que apuntan a una estrecha relación entre el ya exgobernador y Los Leal. Prieto es primo de dos de los fundadores de Los Leal, Daniel Leal Prieto, alias “Danielito”, y Jorge Leal. Después de presuntamente asesinar al excabecilla de la pandilla, Antonio Meleán, en 2008 —hecho que habría desencadenado la conformación de Los Leales—, Danielito supuestamente buscó refugio en la oficina de Prieto, quien entonces era alcalde de San Francisco.

Prieto al parecer continuó ordenándole a la policía que fuera tras la pandilla Los Meleán, en tanto que Los Leal pudieron expandirse significativamente por fuera de su centro en el municipio de San Francisco, con aparente impunidad.

La línea divisoria entre fuerzas de seguridad y actores criminales también se hizo más difusa durante su administración. En 2019, fue sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, entre otras razones por la presunta participación de muchos policías en el tráfico de drogas y armas durante su mandato.

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A pesar de que perdió la gobernación, Prieto, gracias a su estrecha relación con las fuerzas de seguridad, podría seguir debilitando al nuevo gobernador Rosales.

La derrota de Prieto también es un golpe significativo para Diosdado Cabello, quien le había ayudado a Prieto en la nominación para postularse para gobernador, y quien es considerado como su padrino.

2. Los disidentes de las FARC pierden a un aliado en Apure

El candidato del PSUV, Eduardo Piñate, ganó la gobernación en Apure, ubicado en la frontera de Venezuela con Colombia, por un margen sorprendentemente estrecho contra su oponente de la MUD. Piñate reemplazará al exgobernador del PSUV, Ramón Carrizalez.

La salida de Carrizalez de la gobernación significa la pérdida de un aliado político para los disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Según un líder del PSUV en Apure que habló con Infobae en agosto, Carrizalez “tiene una larga relación con las FARC”. Varios residentes y líderes sociales de Apure, que hablaron con InSight Crime de forma anónima por razones de seguridad, señalaron que el exgobernador les permitió a los disidentes establecer operaciones en el estado y ayudó a que sus negocios de narcotráfico evadieran el escrutinio por parte del Estado.

En 2021, Apure ha sido escenario de un violento conflicto entre facciones rivales de las ex-FARC, la Segunda Marquetalia y el Frente 10, y el ejército ha intervenido atacando a este último. Como resultado, hubo una purga de actores estatales vinculados al Frente 10, aunque no está claro si la destitución de Carrizalez está relacionada con el conflicto.

Los grandes posibles ganadores de las elecciones en Apure son las Fuerzas Patrióticas de Liberación Nacional (FPLN), también conocidas como Fuerzas Bolivarianas de Liberación (FBL), un grupo guerrillero de izquierda que tiene estrechos vínculos con el gobierno venezolano. Líderes políticos y analistas locales, que pidieron permanecer en el anonimato por razones de seguridad, sostienen que la guerrilla tiene estrechos vínculos con Piñate y que le ofreció ayuda durante su campaña.

La victoria de Piñate, quien es leal a Maduro, también fortalecerá la posición del presidente y sus aliados, a la vez que debilitará a Diosdado Cabello, de quien Carrizalez era partidario.

3. Las elecciones en Falcón y un futuro incierto para el Cartel de Paraguaná

El candidato del PSUV, Víctor Clark, fue reelegido como gobernador en la región caribeña de Falcón, con un amplio margen de 10 puntos, lo que indica que es poco probable que el Cartel de Paraguaná, una asediada red de narcotráfico, tenga un respiro durante este periodo.

Al parecer, Clark tenía vínculos con el jefe del cartel, Emilio Enrique Martínez, alias “Chiche Smith”, pero es claro que cualquier protección política ha sido retirada, dado que las operaciones del cartel han sido atacadas repetidamente durante el último año, lo que culminó con el arresto de Martínez en abril de 2021.

El grupo perdió además a un aliado clave, Alcides Goitia, quien fue derrotado en las elecciones para la alcaldía en el municipio de Carirubana. El grupo y el alcalde habían coordinado eventos comunitarios de manera conjunta; además, Goita fue captado en video con el hermano de Chiche Smith.

4. La victoria de Freddy Bernal en Táchira solidifica la influencia criminal en la política estatal

Freddy Bernal, quien había actuado como “protector del estado” designado por Maduro en Táchira, ganó la gobernación en el estado fronterizo al occidente del país, derrotando a la candidata opositora Laidy Gómez.

Bernal es un abierto defensor de los grupos armados a favor del régimen conocidos como colectivos, específicamente del Colectivo de Seguridad Fronteriza (CSF). Este grupo ha permanecido inactivo durante cierto tiempo, pero antes desempeñaba un papel central en el control de las rutas de contrabando transfronterizo. Si bien esta función ya es menos importante tras la reapertura de la frontera con Colombia, el CSF podría reactivarse para ejercer control en los municipios fronterizos clave donde la oposición disputaba la victoria.

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Bernal también ha sido acusado de ser el enlace político entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el régimen de Maduro. Durante su periodo como “protector de Táchira”, supuestamente organizó una reunión en 2019, a la que asistieron líderes del ELN y funcionarios de alto rango del PSUV. Para el grupo colombiano, su elección quizá signifique que podrá tener una mayor influencia.

5. Los mineros de oro ilegales continúan dominando la política en Bolívar

El vencedor en la contienda por la gobernación en el estado minero de Bolívar fue el candidato del PSUV Ángel Marcano, un aliado clave de Maduro cuya victoria ampliará la base de apoyo del presidente.

La campaña de Marcano también fue apoyada por el exgobernador Francisco Rangel Gómez, quien supuestamente facilitó la expansión de las bandas mineras conocidas como sindicatos, que han llegado a dominar el oro ilegal en Bolívar. Marcano reemplaza a Justo Noguera Pietri, quien durante su mandato intentó controlar a los sindicatos a través de operaciones de las fuerzas de seguridad, a veces en aparente colusión con la guerrilla del ELN. 

En el municipio de Sifontes, a Daniel Romero, candidato a la alcaldía del Partido Comunista de Venezuela (PCV), con vínculos con el sindicato más poderoso de la región, la Organización R (OR), el Consejo Nacional Electoral (CNE) le prohibió postularse. Esta decisión le negó al grupo la posibilidad de ganar influencia política para complementar su poder armado y legitimidad social. Por su parte, en el municipio de El Callao, el candidato opositor Coromoto Lugo regresa al poder en el centro minero, donde el sindicato dominante está enfrascado en una violenta confrontación con las fuerzas de seguridad.