Las autoridades mexicanas han confirmado que el grupo narcotraficante CJNG fue el responsable del reciente secuestro del hijo del jefe preso del Cartel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán, una señal de que el jefe máximo del CJNG puede tener intenciones de suplantar al narco en desgracia.
El hijo de El Chapo, Alfredo Guzmán, y otros seis hombres fueron secuestrados de un restaurante de lujo el 15 de agosto en Puerto Vallarta, Jalisco.
Fuentes de la policía indicaron inicialmente a InSight Crime que investigaban la posibilidad de que el rapto tuviera relación con la pugna que sostienen el poderoso Cartel de Sinaloa y la organización criminal dominante en Puerto Vallarta, el Cartel de Jalisco – Nueva Generación (CJNG). El fiscal general de Jalisco, Eduardo Almaguer, ya ha confirmado que los captores pertenecían al CJNG, según informes de Milenio.
El CJNG, considerado uno de los Carteles más formidables y agresivos de México, está dirigido por Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”. Nacido en la región de Tierra Caliente, al suroeste del estado de Michoacán, El Mencho ha estado implicado en narcotráfico desde la década de 1990. En 2010, El Mencho creó el CJNG de los restos del Cartel Milenio de Jalisco. El grupo ha consolidado su presencia por lo menos en ocho estados mexicanos, incluido el Distrito Federal, que equivale a la capital nacional, Ciudad de México.
Análisis de InSight Crime
Ha habido informes de un conflicto en curso entre el CJNG y el Cartel de Sinaloa por lo menos desde 2015, y con la recaptura de El Chapo en enero de este año, este secuestro puede ser un intento de El Mencho de atacar al debilitado capo. No cabe duda de que el CJNG ha sido relacionado con actos de agresión y violencia de alto perfil; un ataque perpetrado por el Cartel en abril de 2015 dejó 15 agentes de la policía mexicana muertos, y al mes siguiente un helicóptero militar fue derribado con un lanzacohetes.
El Chapo no es el único cabecilla del Cartel de Sinaloa, sin embargo, y su suerte no está atada necesariamente a la de su Cartel. Sinaloa opera más como una confederación de narcotraficantes que como una organización jerárquica. Otros capos fugitivos, como Ismael Zambada García, alias “El Mayo”, siguen siendo figuras importantes en el Cartel. Lo cierto es que el negocio de la droga del Cartel de Sinaloa apenas si se vio afectado por el anterior arresto de El Chapo en 2014.
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Aunque el secuestro de su hijo ha copado los titulares de los diarios mexicanos, El Chapo también fue noticia al concedérsele el regreso a la cárcel de máxima seguridad de Altiplano. En 2015, se escapó de Altiplano e inicialmente fue retenido allí después de su recaptura en enero, pero en mayo fue enviado a una cárcel en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez.